El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) y la Brigada de Delitos Medio Ambientales y Contral el Patrimonio Cultural (Bidema) de la Policía de Investigaciones de Chile concluyeron la semana pasada la primera expedición instruida por la Fiscalía de Aysén para analizar las razones que han provocado el varamiento de 124 delfines calderón o piloto (Globicephala melas), entre los que se encuentran desde crías hasta ejemplares adultos, más otras dos especies no identificadas. Todas las muertes se registraron de dos a cuatro meses antes.
Este nuevo varamiento masivo se suma a las 337 ballenas (Balaenoptera borealis) que murieron el año pasado también en las costas de la Patagonia chilena.
El director nacional del Sernapesca, José Miguel Burgos, explicó que el objetivo de esta nueva expedición fue identificar el número de animales, georeferenciarlos y fotografiarlos, además de determinar la especie y verificar externamente si existen signos de daño atribuibles a la acción del hombre para realizar una próxima expedición más extendida para dar con las posibles causas.
“Lo más lamentable es que en este recuento pudimos identificar individuos muy juveniles, algunos bastante pequeños de delfín piloto o también conocido como calderón, que no es la misma especie que registramos en anteriores ocasiones, y por tanto se abre todo un proceso investigativo distinto que comenzará con un aporte científico y con la red que tiene el Sernapesca para poder soportar esta investigación”, precisó la autoridad de fiscalización acuícola-pesquera.
Fuente: Aqua
Fotografía: Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura de Chile