Este mes de enero pasará a la historia por ser el primero en la serie histórica en que el trasvase Tajo-Segura no ha enviado ni una sola gota de agua al sur de la provincia de Alicante desde su inauguración en 1979.
Todo surge del Memorándum del trasvase que establece que llegará agua a la provincia siempre y cuando la cabecera del Tajo se mantenga por encima de los 336 hm3, una circunstancia que no se da en estos momentos.
Además, el Consejo de Ministros de este viernes, que podía haber aprobado un envío de urgencia por motivos de la sequía, no lo ha hecho, según ha denunciado el diputado nacional del PSPV por Alicante, Hérick Campos.
Campos ha alertado que, además, el cierre es sine die dado que no está previsto que “haya lluvias o nieve, de modo que esta situación se puede alargar” y ha recordado que quien tiene “limitado el consumo” es Alicante.
De hecho, el Consejo de Ministros acordó en noviembre y diciembre el envío de 12 hm3, de los que tan solo 4 hm3 iban al sur de Alicante, los 8 restantes se desviaron a Murcia.
Campos ha tildado enero como un mes «negro» porque, además, el Gobierno dio el visto bueno el pasado día 8 a los planes de cuenca del Tajo y el Júcar «con un importante recorte en derechos de agua para la Comunitat y la provincia, y el del Segura, que reconoce un déficit estructural sin aclarar como corregirlo».
Con todo ha recordado que seguirá habiendo agua porque existen las desaladoras de Mutxamel o Torrevieja y “pese a que el PP ha dejado de invertir en infraestructuras hídricas en la provincia».
Fuente y fotografía: El diario
