Los regantes del Trasvase Tajo-Segura se han cansado de esperar a que el Gobierno español de turno apruebe un Plan Hidrológico Nacional que permita solucionar el déficit de agua de la cuenca del Segura -fijado en 400 hm3– y los problemas cíclicos de la cabecera del Tajo. Por ello, pondrán sobre la mesa del próximo Ejecutivo tres proyectos para realimentar las fuentes del Trasvase y con ello impedir que las futuras sequías, como la actual, dejen a cero los envíos para el regadío.
Una de las iniciativas que barajan es conectar el pantano de Valdecañas, ubicado en Cáceres y que pertenece a la cuenca del Tajo, con el canal del Trasvase. Esta infraestructura tiene una capacidad total de almacenaje de 1.446 hectómetros cúbicos.
«En esta zona no hay problemas de agua y ya hemos tanteado la posibilidad de que se haga; en principio el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara no se opondría», explicó el dirigente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Scrats, José Manuel Claver. «Tampoco creemos que hubiera mucha resistencia desde Castilla-La Mancha, porque también se podrían beneficiar de esta iniciativa», añadió Claver.
El segundo proyecto se centraría en recargar los embalses de la cabecera del Tajo con agua del Duero; y la tercera alternativa, conectar el acueducto con la cuenca del Ebro.
«Nosotros nos encargaríamos de todo. Es decir, haríamos el proyecto, lo ejecutaríamos y lo abordaríamos económicamente en su totalidad, con lo que el Estado no tendría que invertir ni un euro; su papel se centraría en dar la autorización y solventar los problemas jurídicos», explicó el presidente del Scrats, añadiendo que «más no se puede pedir».
Los regantes acordaron presentar estas iniciativas en su última Junta General Ordinaria, que celebraron en Murcia el pasado 16 de diciembre. «Allí decidimos dar un paso adelante y no dejar el cuerpo quieto; y como dijo uno de los regantes, «’mejor estar hilando que estar mirando’», apuntó.
En esta fase de la decisión asamblearia no concretó la cantidad de agua que se podría traer al Segura con esta nueva infraestructura si al final se llevase a cabo. «Eso se definiría en el estudio o anteproyecto, donde se tendría en cuenta la disponibilidad de recursos y el precio que habría que pagar, entre otras cuestiones», matizó Claver.
Los regantes no dudan de que contarán con el apoyo del Gobierno de la Región de Murcia, e incluso no descartan conseguir el de los ejecutivos valenciano y castellano-manchego. «Al fin y al cabo, será beneficioso para las tres comunidades», defendió.
Pero no sólo se están pensando en alternativas para redotar la cabecera del Tajo desde el Sindicato. El Foro Pro Agua de Alicante, un lobby integrado por las universidades de Elche y Alicante, y empresarios y regantes de esa provincia, ha planteado al Gobierno que habilite una conexión hacia el Segura desde el Tajo Medio en la sierra de Gredos.
Argumentan que en esa zona hay un régimen de lluvias de 2.500 litros por metro cuadrado al año y el caudal es mineral. Para el presidente del Scrats, sin embargo, «no es una solución factible».
Agua hasta marzo
Por otra parte, los regantes del Trasvase siguen mirando al cielo como única esperanza para tener agua disponible a partir de marzo. «Vamos a adoptar a San Pedro», ironizó José Manuel Claver.
Lo cierto es que debido al aumento de las reservas ‘intrasvasables’ de la cabecera del Tajo, que han pasado de 304 a 336 hm3 este año, si no llueve en abundancia en esa zona, no llegará ni una gota de agua para regar, ni para beber. Y el agua desalada y de los pozos de sequía solo les llega hasta marzo.
«Estamos intentando cerrar acuerdos con comunidades de regantes para comprar sus excedentes, pero está siendo muy complicado», lamentó el presidente del Scrats.
Fuente y fotografía: La Opinión de Murcia