Elisabet González, es la responsable de Drop Roofs,una iniciativa que se le ocurrió cuando observaba el rocío que encontraba por las mañanas en las superficies de los coches ¿por qué no aprovechar de alguna forma ese agua en las viviendas? De esa manera, diseñó una cubierta integrada en los edificios que, además de captar el rocío nocturno, pudiera recoger la lluvia y destilar mediante la energía solar toda este agua. Así fue como nació este innovador proyecto que aúna arquitectura y sostenibilidad, cuyo objetivo es ayudar a solventar el problema de la escasez de agua en el mundo.
Drops Roof consiste en una placa captadora de agua trabaja las 24 horas del día, de forma pasiva, y cubre totalmente la demanda de agua de la vivienda tanto para uso doméstico como para beber. Estas placas se pueden adquirir por módulos de un metro cuadrado, y se pueden añadir o quitar según las necesidades del usuario.
Este proyecto de arquitectura sostenible no ha pasado desapercibido a nivel reconocimientos y financiación. Además de obtener Matrícula de Honor en la tesis final de Máster, Drops Roof ganó el año pasado el premio de emprendimiento Santander Explorer de la Universidad de Barcelona. Gracias a eso, González pudo viajar a Silicon Valley (Estados Unidos) junto a otros 51 jóvenes emprendedores de este programa.