Finaliza la reunión del ICCAT en Marruecos en la que se debatió sobre el aumento de las capturas de atún rojo. La decisión está tomada: el ICCAT aprobó un aumento en las cuotas de captura de hasta 36.000 toneladas para 2020, la mayor captura permitida jamás para el atún rojo.

WWF ya denunció el caso. Como ya avisaba la organización hace unos días, la difícil recuperación de la población de esta especie aún no está confirmada y lo más probable es que disminuya con tal nivel de captura.

Según Raúl García, coordinador de Pesquerías de WWF España, “WWF quiere mostrar su rechazo porque ICCAT ha elegido primar los beneficios económicos a corto plazo cuando esperábamos una victoria conservacionista a largo plazo. Y más grave es la cuota de 2.350 toneladas aprobadas para la sobreexplotada población occidental que descenderá otro 9%”.

La mayor organización dedicada a defender la naturaleza y el medio ambiente teme que el comité científico de ICCAT no sepa las consecuencias a las que se expone, por eso pide que mejore su metodología para brindar recomendaciones científicas robustas y claras en el futuro.

“Durante los últimos 10 años hemos luchado para salvar al atún rojo. Estábamos tan cerca de su plena recuperación que es un escándalo ver a ICCAT volver a aplicar el modelo de siempre, poniendo en peligro todo el progreso logrado”, señala García.