La ciudad de Madrid ya tiene contenedores de tapa marrón para restos orgánicos desde el pasado 1 de noviembre. Estos depósitos llegarán a 125.000 viviendas de diez distritos, afectando así a 255.003 habitantes en 17 ámbitos.
El proyecto piloto “Madrid acierta con la orgánica” va acompañado de una campaña de información y concienciación sobre la correcta utilización de dichos contenedores.
El objetivo del Ayuntamiento es que el proyecto esté implantado en toda la ciudad al finalizar la legislatura. Además contarán con 50 contenedores grandes para once mercados, quince centros comerciales, ocho hospitales, dos hoteles y otros catorce espacios.
El contenedor de tapa marrón se recogerá diariamente por parte del Ayuntamiento y se utilizará para restos de comida, jardinería doméstica, frutos secos, restos de marisco, cascaras de huevo, café, té, papel de cocina, servilletas sucias, tapones de corcho, cerillas o serrín. Mientras, en el cubo naranja se depositarán pañales, compresas, toallitas húmedas, colillas, pelo, excrementos de animales, arena de gato, chicles o polvo de barrer
La campaña estará en marcha hasta el 19 de mayo de 2018 pero para la primera fase piloto, que dura hasta el 7 de diciembre de 2017, se organizarán visitas a los hogares y comercios para explicar cómo realizar la separación de residuos correctamente, además de actividades en centros educativos y otras asociaciones.