La empresa azteca Biobox desarrolló una novedosa idea para impulsar el reciclaje en Ciudad de México, lugar donde viven más de 8 millones de personas.
Se trata de una nueva forma de pago para los usuarios del Metro: pagar dicho transporte público con basura. De esa forma, quienes lleven sus residuos podrán abonar saldo a favor a sus tarjetas.
La idea es reutilizar envases de plástico y aluminio y recompensar a los usuarios con puntos, los que podrán canjearse como dinero para el Metro o bien para entradas al cine u otras actividades.
A través de Reverse Vending Machine (máquina expendedora a la inversa), el usuario podrá introducir el envase PET o latas de bebida y abonar dinero a cambio.
Fuente y fotografía: Diario ecología