Las olas del mar serán a partir de hoy una de las fuentes suministradoras de energía eléctrica deGibraltar, colonia que ha apostado por este nuevo método debido a sus limitaciones de espacio para albergar otro tipo de instalaciones, como las solares o las eólicas.
Se trata de una planta piloto, una instalación en la que ocho plataformas flotantes de apenas un metro cuadrado se han instalado en un espigón donde baten las olas.
El sistema recoge la fuerza de las olas y la transforma en energía que se distribuye por la red eléctrica.
Esta primera instalación, ubicada en el lado de levante de El Peñón, generará 0,5 megavatios.
“La energía solar depende de que haya sol, la eólica de que haya viento, pero olas hay todo el tiempo”, explica a Efe David Leb, cofundador de la empresa Ecowave, con sede en Israel y que ha ideado este sistema que ya se está probando en Tel Aviv y Ucrania.
Leb explica que, dadas las limitaciones de espacio de Gibraltar y el oleaje en el Estrecho, este sistema es una buena solución y espera que con el tiempo se utilice en más puntos de la costa.
“La instalación es muy sencilla, no tiene impacto medioambiental, es muy fácil de mantener y resulta más barata que otras”, detalla, mientras señala que para conseguir el objetivo de reducir la contaminación en el planeta “necesitamos todas las opciones, todas las energías renovables, porque la solución no va a venir de un sólo recurso”.
En la inauguración de esta planta piloto, el ministro de Medio Ambiente y Cambio Climático de Gibraltar, John Cortés, ha mostrado su “ilusión” por que la colonia se vincule con las energías renovables que son “el futuro”.
Gibraltar está ahora identificando otros espacios para ampliar la instalación con el objetivo de que este sistema pueda generar “a medio plazo” hasta 10 megavatios, lo que sería “la tercera o cuarta parte” de la energía que requiere el Peñón.
“No se trata sólo de lo que se ahorra en el plano económico, sino en contaminación”, ha añadido el ministro.
El gobierno ha hecho una “inversión muy pequeña, sólo echar el cable hasta la orilla del mar” porque ha sido la empresa la que se ha hecho cargo del resto a cambio de que luego se le compre la energía que se produce, ha explicado.
Fuente y fotografía: EFE Verde