Los embalses de la Comunidad de Madrid han arrancado 2016 medio vacíos debido a la escasez de lluvias del pasado otoño, pero desde el Canal de Isabel II aseguran que no hay riesgo de sequía porque con los recursos actuales los madrileños tienen garantizado el abastecimiento de agua durante dos años.
El primer día del año, las reservas de los catorce embalses del Canal de Isabel II estaban a algo más de la mitad de su capacidad (58,17 %), con un total de 550,219 hectómetros cúbicos de agua.
Unas cifras que distan mucho de las registradas el 1 de enero de 2015, cuando la media de almacenamiento de los embalses era del 77,4 %, al disponer de 732,094 hectómetros cúbicos de agua del total de 946 que pueden llegar a recoger.
El Canal de Isabel II achaca la situación actual a la escasez de precipitaciones, ya que el último episodio de lluvias sostenido en la región tuvo lugar en marzo de 2014 y las de octubre de 2015 no fueron suficientes porque el terreno estaba muy seco tras el verano.
Sin embargo, la situación ha empezado a cambiar a partir del 3 de enero gracias a las precipitaciones que cayeron en la Comunidad de Madrid esta Navidad, de manera que en poco más de una semana las reservas han aumentado ligeramente.
La información actualizada se puede ver en la página web canalgestion.es o en la aplicación móvil del Canal de Isabel II.
Este lunes, 11 de enero, las reservas están al 59 %, con 558,748 hectómetros cúbicos de agua.
A lo largo de 2015, el consumo de agua en toda la región fue de 498 hectómetros cúbicos.
El embalse de Pinilla es el que está más lleno en la actualidad, con un 62,10 % de su capacidad (23,641 hectómetros cúbicos de agua) y el que menos el de El Vado, al 17,90 % (9,965).
La presa de El Atazar, que puede llegar a almacenar la mitad de las reservas de agua de toda la región, contiene el 73,60 % con 312,829.
Los catorce embalses gestionados por el Canal de Isabel II son los que abastecen mayoritariamente a los ciudadanos de la Comunidad de Madrid.
Algunas localidades como Alcalá de Henares se nutren de otros como el de Beleña, perteneciente a la Mancomunidad de Aguas del Sorbe (MAS), que recientemente ha aprobado la constitución de la Comisión de Sequía.
Lo ha hecho después de que el pasado 1 de enero se declarara el nivel de alerta de este pantano, que da servicio al total de 44 municipios (43 en Guadalajara y uno, Alcalá de Henares, en la Comunidad de Madrid) que integran la MAS.
Sin embargo, desde el Canal de Isabel II Gestión aseguran que en lo referente a los embalses que gestiona esta empresa, cuyo máximo accionista es el Gobierno de la Comunidad de Madrid, no hay riesgo de sequía.
«Estamos con menos agua embalsada, nada más», ha declarado a Efe la directora de operaciones del Canal, Belén Benito.
De hecho, ha explicado que, aunque no lloviese, los ciudadanos de la región tienen garantizado el suministro durante dos años a través de los recursos almacenados actualmente en los embalses y con las aportaciones del río Alberche y de las aguas subterráneas.
«No tenemos que preocuparnos por la situación», ha subrayado.
Asimismo, ha recordado que el año pasado el momento en que los ríos madrileños estaban más caudalosos y los embalses tuvieron su máximo apogeo fue a finales de enero y durante los meses de febrero y marzo.
Por ello, todavía hay margen de recuperación, más aún teniendo en cuenta los pronósticos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para la Comunidad de Madrid, donde se prevé la llegada de un nuevo frente para el jueves (el tercero en menos de una semana) que traerá más lluvias.
La jefa de climatología de la Delegación territorial en Madrid de la Aemet, María Dolores Pecharromán, ha señalado que aún es pronto para saber qué nos deparará el resto del invierno, pero ha destacado que en los primeros días del mes de enero las cifras de precipitaciones han sido «buenas» tras un mes de diciembre calificado de muy seco.
A pesar de todo, siempre es recomendable seguir los consejos que propone el Canal de Isabel II para ahorrar agua, como cerrar el grifo de la ducha mientras nos enjabonamos, usar la lavadora con la carga completa y el programa adecuado o coloca una papelera en el cuarto de baño para evitar usar el inodoro como cubo de basura.
Fuente y fotografía: El Economista