Las Islas Canarias podrían cubrir todas sus necesidades energéticas de fuentes renovables para 2050, según un estudio del Centro Aeronáutico y Espacial Alemán (DLR) para Greenpeace publicado hoy.
De acuerdo con la proyección del Instituto de Termodinámica Técnica dependiente del DLR, el archipiélago español podría lograr en algo más de tres décadas un sistema energético «sostenible», «sin emisiones» y «económicamente razonable».
El estudio habla de un «escenario de (r)evolución energética» en el que la actual dependencia del petróleo (la principal fuente de energía en la comunidad) podría ser progresivamente sustituida con la instalación de 12 gigavatios nuevos de solar y eólica.
Así, las energías fotovoltáica, térmica y eólica supondrían más del 80 % del suministro, según este cálculo, que prevé completar las necesidades de las islas con las energías geotérmica, biomasa y mareomotriz, en parte para evitar depender excesivamente de una sola tecnología.
La propuesta muestra «cómo se puede acabar con la dependencia del petróleo y con ella reducir a cero las emisiones y los costes de la compra de combustibles fósiles, sin tener por ello que recurrir al gas natural en la transición», explica el DLR en un comunicado.
Esta transición energética precisaría de una inversión de unos 20.000 millones de euros hasta 2050, pero supondría un ahorro de 42.000 millones de euros en adquisición de recursos fósiles.
«Todos los costes que se pueden ahorrar en la compra de crudo cubrirían según nuestros cálculos todos las inversiones y, además, permitirían la construcción adicional de infraestructura de apoyo como acumuladores de energía o redes», afirma la investigadora Sonja Simon.
Además, el kilovatio hora en 2050 sería así más barato que con el modelo energético actual, añade el estudio: entre 17 y 20 céntimos de euro frente a 23 céntimos de mantener el modelo actual.
El informe perfila un futuro en el que las energías solar y eólica serán las tecnologías dominantes y en el que la eficiencia energética reducirá de forma sensible el consumo total, pese al tirón de la demanda ligado al auge del coche eléctrico.
Fuente y fotografía: Canarias7