En una década el número de especies en peligro de extinción se ha triplicado en España de 14 a 38. Aves tan familiares como los vencejos, las golondrinas o los gorriones sufren desde hace años el descenso de sus poblaciones. De hecho, durante la primavera pasada, al menos una de cada tres aves con presencia habitual en España experimentó un declive en su número de especímenes.
Las causas fundamentales del descenso de poblaciones son: determinadas prácticas agrícolas intensivas, el abandono de actividades agrarias y ganaderas tradicionales, el calentamiento global o la destrucción de hábitats y lugares de nidificación. Así lo confirmó SEO/BirdLife en el 23º Congreso Español de Ornitología (Badajoz) donde insistió que estas amenazas están dañando los paisajes naturales y las especies que en ellos habitan.
Para conseguir estos datos, SEO/BirdLife realizó el pasado año un seguimiento de especies en invierno y en primavera, actividad que hace todos los años desde 1998. Descubrieron que, de las 115 especies consideradas comunes, 69 son sedentarias todo el año, 39 se observan únicamente en primavera y 9 solo pasan el invierno en territorio español. Durante la época de reproducción (en primavera), el 37% de las especies comunes muestran una situación desfavorable mientras que en invierno el declive de las poblaciones afecta al 19% de las poblaciones censadas.