El huracán Harvey, convertido ya en tormenta tropical, se ha fortalecido ligeramente en las últimas horas en aguas del Golfo de México y sus vientos aumentaron a 75 kilómetros por hora frente a la costa de Texas, donde sigue dejando lluvias que amenazan con aumentar el saldo temporal de ocho víctimas mortales.
Según informa la Agencia EFE, En su último boletín, emitido a las 21.00 GMT, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos amplió la zona de aviso de tormenta tropical a nuevas zonas de Luisiana, donde ya se sienten los efectos del ciclón, el más poderoso en llegar a Texas desde 1961.
Harvey, que alcanzó la costa con vientos máximos sostenidos de 215 kilómetros por hora, lo que le convirtió en huracán de categoría 4 en la escala Saffir Simpson, para un máximo de 5, se desplaza hacia el este-sureste a 6 kilómetros por hora y se halla a 70 kilómetros al este de Port O’Connor y 235 de Port Arthur (Texas).
A pesar del fortalecimiento de la velocidad de los vientos, la preocupación reside en las “inundaciones catastróficas que amenazan la vida en el sureste Texas”, señaló el NHC. Se espera que Harvey deje hasta el jueves nuevas lluvias que podrían alcanzar lentre 25 y 50 centímetros en el suroeste de Luisiana y el norte de Texas.
El otro gran peligro es el aumento del nivel del mar en las zonas costeras, debido a la marejada ciclónica y las altas olas que provocan los fuertes vientos, y en algunas zonas se esperan aumentos del nivel del mar hasta un metro de altura. Ante esta situación, el NHC reiteró su petición de que las personas que se encuentran a salvo no intenten regresar a las zonas afectadas y no se conduzca por carreteras inundadas.
La tormenta está previsto que se desplace hacia el noreste y a lo largo de la costa de Texas hasta el miércoles, cuando volverá a tocar tierra cerca de la frontera con Luisiana, para dirigirse hacia el norte, donde se disipará a finales de semana, no sin antes dejar importantes lluvias en toda la región.