Un estudio del grupo de investigación Ecotox de la Universidad de Vigo revela que los vertidos de aguas residuales limitan la calidad del marisco que se produce en la ría de Arousa.
El informe, del que ya se presentaron en abril los primeros resultados sobre los niveles de plomo del «relojito», fue encargado por las organizaciones de productores y cofradías de la Ría de Arousa y el Consello Regulador del Mejillón a través de la Plataforma para la Defensa de la Ría de Arousa y fue financiado por el sector.
Ricardo Beiras, catedrático de ecología de la Universidad de Vigo, ha explicado que con esta investigación querían estudiar el efecto de las aguas residuales procedentes de aportes costeros, tanto a través de emisarios submarinos de las Estaciones de Aguas Residuales urbanas (Edar’s) como de vertidos ubicados en la línea de costa.
El estudio se realizó sobre tres zonas de fuerte producción marisquera de la ría: Cambados-O Grove, Vilanova de Arousa y Pobra do Caramiñal-Cabo de Cruz.
La investigación determinó la existencia de aportes contaminantes de relevancia originados por vertidos líquidos depurados y no depurados de aguas residuales urbanas en lugares de alta producción marisquera de la ría.
«Esta situación pone en evidencia que hay deficiencias importantes en la red de saneamiento en la ría y un insuficiente o inexistente tratamiento terciario de desinfección de las Edar», señaló Beiras.
Según ha explicado Beiras, este déficit de depuración de las aguas residuales urbanas «causa que se inyecten en la ría cantidades importantes de microorganismos coliformes ya que la depuración no es completa, incluso en depuradoras de última generación que ya cuentan con tratamiento terciario y fase de desinfección».
«Fuimos a una depuradora que cumple con una directiva europea al respecto de la depuración de aguas residuales urbanas y tiene una cifras de coliforme en sus emisarios de acuerdo a los controles oficiales (entre 0 y 30 Unidades Formadoras de Colonias por 100 ml) pero en la práctica, cuando fuimos a medirlo, estas cifras oscilan entre 17 y 27.000 unidades, muy por encima de las cifras oficiales», destacó Ricardo.
El estudio refleja que gracias al enorme poder autodepurante del agua del mar, muchos de los bancos marisqueros, como las bateas de mejillón, no sufren esta contaminación debido a la capacidad natural de eliminación de microorganismos y, así, el marisco que se comercializa es sano.
Además, en este estudio también se valoraron las causas naturales y humanas de la mortandad de marisco como consecuencia de las bajas de salinidad que se producen en el banco de Lombos do Ulla.
Xaquín Rubido, portavoz de la Plataforma para la Defensa de la Ría de Arousa, ha explicado que con esta situación, se pone sobre la mesa la necesidad de regular claramente el uso de los embalses.
Rubido ha señalado que «no existe un protocolo de actuación que tenga en cuenta la existencia de importantes recursos marisqueros en las desembocaduras de manera que no coincidan los desagües de los embalses con lluvias muy intensas y prolongadas en el tiempo».
«Se debería regular de forma que los embalses vaciasen teniendo en cuenta que, con su salida de agua, incrementan la bajada de salinidad producida por la lluvia, lo que produce una fuerte mortandad del marisco», añadió.
El portavoz de PDRA destacó que las pérdidas como consecuencia de esta bajada de salinidad durante el invierno de 2013/2014 superaron el millón de euros.