No hacía falta esperar a la Cumbre de París para anticipar algunas de las consecuencias financieras del cambio climático. De ese cónclave salieron compromisos concretos sobre reducción de emisiones en los próximos 10-15 años y el genérico de asunción del camino hacia la completa descarbonización. Ello obliga a cuestionar el valor de no pocos activos…