Altas temperaturas, menos hielo en ambos polos y corales amenazados: eso es lo que muestra hasta ahora 2017.
Preocupante, así califica el sitio especializado Yale Climate Connections. Será un año de climas extremos, a juzgar por lo visto apenas en el primer trimestre, informa El Colombiano.
No es para menos. La Administración de Atmosférica y Oceánica de Estados Unidos (Noaa) resaltó que el periodo enero-marzo hace de este año el segundo más caliente en los registros de 138 años.
Hubo algo más estremecedor: ningún mes antes de marzo había excedido la temperatura del promedio 1980-2010 en 1°C y en ausencia de El Niño, claro indicativo del acelerado calentamiento global.
Un dato inquietante si de acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial hay una probabilidad del 50 al 60 por ciento de que en la última parte del año se posicione, de nuevo, El Niño, que calentaría más el planeta.
De acuerdo con Yale desde 1970 ha aumentado 0,86 °C, la temperatura del planeta habiendo sido mayor el incremento sobre la superficie de la tierra que sobre océanos, en particular en regiones árticas.
En los primeros tres meses las temperaturas fueron más altas que el promedio del siglo pasado. La tendencia sugiere 50% de chances de que este año sea el más caliente.
Ese aumento se ha dado pese a que no está El Niño, que marcó el calentamiento en buena parte del año pasado, cuando durante varios meses además se tuvieron las menores coberturas de hielo marino en los polos y el segundo mínimo de extensión de la capa congelada en el Ártico. .
En cada continente la situación fue diferente, de acuerdo con el reporte de la Noaa: Europa y Oceanía vivieron el segundo marzo más caliente; Asia, el cuarto: África el séptimo; Sudamérica el decimosegundo; y Norteamérica el trigésimo.
Una de las preocupaciones, dice el informe de Yale, se relaciona con los corales. La temperatura alta del océano conlleva a su blanqueamiento y alta mortalidad en esos estratégicos ecosistemas. Hasta mediados de los 80 no se había reportado ningún evento de esos, desde entonces ha habido tres, vinculados con El Niño, incluyendo el de 2015/16. Y a pesar de que ahora no rige ese fenómeno, el blanqueamiento ha continuado, afectando en gran extensión la Gran Barrera de Coral de Australia.
Previsiones
La OMM actualizó su previsión sobre El Niño y La Niña. Ahora considera que existe 50 a 60% de probabilidad de que aquel se presente en el segundo semestre. La emergencia de La Niña es muy improbable.
La incertidumbre se debe a que las predicciones antes de mayo o junio para ese fenómeno no son tan claras.
“Los recuerdos están todavía frescos de lo poderoso que fue El Niño 2015/16, que estuvo asociado con sequías, inundaciones, blanqueamiento de coral en diferentes partes del globo, lo que en combinación con el cambio climático llevó a un récord de temperatura en 2015 y 2016”, comentó Maxx Dilley, director de la división de Predicción del Clima y Adaptación de la OMM.
En Colombia más de 300 municipios padecieron escasez de agua.
La OMM aclaró que los efectos de El Niño no son siempre iguales: depende de la intensidad del evento, del momento en el que se desarrolle y en las interacciones con otros patrones climáticos.
Si 2017 será el cuarto año consecutivo que rompa marca de temperatura, está por verse pero que la tendencia al alza persiste no se duda.