El Gobierno francés abrió el viernes un proceso de consulta pública para crear un área marina protegida de 1,6 millones de kilómetros cuadrados (km2) en las tierras australes francesas, considerada la mayor del mundo con una superficie superior a la de Francia, España y Alemania juntas.
El área comprende hasta los límites de las zonas económicas exclusivas (ZEE) de los archipiélagos franceses de Crozet, Kerguelen, Saint-Paul y Ámsterdam, al sur del océano Índico en un punto intermedio entre el África austral y la Antártida.
La propuesta, que no incluye su coste, estará a disposición del público en línea hasta el 17 de marzo en la página del ministerio que dirige Ségolène Royal, para que los ciudadanos pueden enviar sus sugerencias.
Entre las medidas, se incluyen la prohibición de la pesca de tiburones y rayas y la utilización de métodos de captura que dañen el fondo marino; la lucha contra ciertos vertidos que puedan provocar la introducción de especies marinas exóticas que amenacen la biodiversidad local, y la promoción de expediciones científicas.
Las tierras australes francesas constituyen un patrimonio natural excepcional que incluye 11 especies de osos marinos declarados en peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
El área protegida francesa será mayor que la creada por el expresidente de Estados Unidos Barack Obama en agosto del 2016 en las aguas que rodean el archipiélago de Hawái, la más grande del mundo en la actualidad.
También superará a la aprobada el pasado octubre por 24 países y la Unión Europea por la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCRVM) en el mar de Ross, en el océano Antártico, de algo más de 1 millón de km2, que entrará en vigor a finales de este año.
Fuente y fotografía: ABC