El autor principal, Rick Stafford, ha indicado que «la investigación demuestra de manera muy real las consecuencias de gran alcance de la sobrepesca y de las prácticas bárbaras como el aleteo de tiburón». «Necesitamos ser mucho más conscientes de la importancia de los ecosistemas marinos y de cómo pueden afectarnos a todos», ha declarado.
«El estudio identifica a los tiburones como una parte importante del funcionamiento del ecosistema marino, no como criaturas a las que temer y perseguirlas», ha apuntado Elisabeth Spiers, una de las investigadoras responsables del estudio.
El equipo cree que los informes negativos de los medios de comunicación sobre los ataques de tiburones, junto con la falta de conocimiento de los ecosistemas marinos han resultado en un apoyo público limitado para la conservación marina. «Esperamos que este estudio ayude a las personas a comprender la importancia del medio ambiente marino y que protegerlo puede tener efectos importantes en procesos aparentemente no relacionados como el cambio climático», ha insistido Stafford.