El agua sigue siendo un elemento transcendental en la conservación del medio ambiente y el bienestar de las personas. En este sentido, la celebración del Día Mundial del Agua (22 de marzo) vuelve a ser este año mucho más que un acto protocolario para convertirse en una llamada de atención a las instituciones, los gobiernos y la sociedad en general.
La convocatoria de Naciones Unidas cobra este año una especial importancia porque se centra en la correcta gestión de las aguas residuales y la reutilización de los recursos de agua. Aunque es evidente que estos dos aspectos afectan con especial gravedad a los países en desarrollo no se puede olvidar que también en España siguen existiendo ciudades importantes en las que todavía no se lleva a cabo un tratamiento adecuado de las aguas residuales.
La ONU recuerda que la meta 6.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) nos exige que en el horizonte de 2030 se logre mejorar la calidad del agua, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales que se vierten al medio natural sin tratar (depurar) y aumentando considerablemente la reutilización de estos recursos.
Más de 1.800 millones de personas hacen servir recursos de agua con graves problemas de contaminación
El conjunto de la humanidad todavía está muy lejos de este objetivo porque más del 80% de las aguas residuales generadas por la sociedad regresa al ecosistema sin haber sido tratada o reutilizada.
Además, como reconoce la ONU, unos 1.800 millones de personas hacen servir para consumo agua procedente de fuentes, ríos, pozos o manantiales contaminados; por lo que corren el riesgo de contraer enfermedades graves como el cólera, disentería, fiebre tifoidea y poliomielitis.
De hecho, el agua insalubre y un saneamiento e higiene deficientes causan alrededor de 842.000 muertes al año en el conjunto del planeta.
España sigue con puntos negros
La Comisión Europea denuncia la existencia de 17 poblaciones españolas que no depuran correctamente sus aguas residuales
España ha mejorado en el tratamiento de las aguas residuales durante los últimos años pero todavía mantiene algunos puntos negros importantes. En 2001, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea condenó a España por la existencia de 37 ciudades de más de 15.000 habitantes que no depuraban correctamente sus aguas residuales.
El pasado mes de noviembre, la Comisión Europea decidió volver a llevar a España ante este alto tribunal porque en 17 de estas poblaciones todavía no se ha solucionado el problema denunciado 15 años atrás. La lista de puntos negros incluye Nerja, Marbella, Estepona, Alhaurín el Grande y Coín.
La planta de regeneración de agua del Prat de Llobregat, construida hace casi 10 años, debería funcionar a pleno rendimiento
Catalunya apuesta por la reutilización
Las 500 depuradoras de aguas residuales construidas en Catalunya dan servicio en la actualidad al 97% de la población (solo quedan sin cubrir pequeños núcleos aislados). El reto para el futuro inmediato en la gestión del agua en Catalunya -plenamente en la línea del tema del Día Mundial de este año- es incrementar la reutilización del agua tratada.
En este sentido, la Agencia Catalana del Agua apuesta por la reactivación de la Estación de Regeneración de Agua del Prat de Llobregat, una infraestructura construida para hacer frente a la sequía de 2007-2008 pero hasta ahora muy poco utilizada.