Barcelona ha duplicado el número de árboles en las calles en 30 años. Son datos del informe Proyecto Ecklipse, encargado por la Comisión Europea, en el que ha participado la ecóloga del Centre de Recerca i Aplicacions Forestals (Creaf), Corina Basnou.
Según Creaf, el capítulo sobre el reto de gestionar la calidad del aire en las urbes elogia las políticas adoptadas por Barcelona al potenciar el espacio verde. Asimismo, no solo han mejorado la calidad del aire, sino que también ayudan a la mitigación y la adaptación del cambio climático.
Barcelona, en el 2008, contaba con un 36,8% de zonas verdes con 153.000 árboles, lo que supone el doble que hace 30 años. La cantidad de árboles que se encuentran por las vías urbanas se ha ido aumentando hasta que en 2017 se ha llegado a 235.000.
En el Plan director de Arbolado 2017-2037 se prevé introducir especies más variadas de árboles y sobre todo, que estas estén más preparadas ante el cambio climático.
Fuente y fotografía: El Periódico