Pekín y la ciudad vecina de Tianjin han puesto en marcha este viernes 16 de diciembre la alerta roja por contaminación atmosférica, mientras que 21 ciudades más en el norte de China podrían aplicar esta misma medida de control en las próximas horas. La alerta roja estará en vigor en Pekín y Tianjin por lo menos hasta del día 21, “cuando se espera que la calidad del aire mejore”, según ha informado el ministerio de Protección Ambiental de China a través de una nota publicada en su página web.
De acuerdo con el plan de respuesta de emergencia para la contaminación del aire severa lanzada en noviembre, cuatro días consecutivos de contaminación atmosférica pesada, incluyendo dos días de grave contaminación del aire, activan una alerta roja. También se emite una alerta roja si el índice de calidad del aire llega a 500. La alerta roja -la de máximo nivel en la escala del plan de emergencia- no había sido activada en Pekín desde diciembre de 2015.
Las autoridades de transporte de ambas ciudades han anunciado controles para limitar el tránsito de vehículos contaminantes en los centros urbanos, incluida la prohibición alterna por número (par o impar) de las matrículas. En Pekín, los vehículos altamente contaminantes no podrán circular mientras se mantenga la alerta roja.
Las ciudades afectadas por el máximo nivel de emergencia deberán paralizar las obras en espacios abiertos, limitar la actividad en las industrias contaminantes y suspender las clases en centros educativos (para reducir la movilidad y la exposición a la contaminación de la población más joven).
Además de Beijing y Tianjin, el Ministerio de Protección Ambiental ha indicado que otras 21 ciudades, entre las que se encuentran Shijiazhuang, Taiyuan y Zhengzhou, podrían decretar la alerta roja en las próximas horas, mientras que otras nueve podrían emitir una alerta naranja (segundo nivel en la escala de emergencia).
Fuente y fotografía: La Vanguardia