El nuevo rector del Colegio de Ingenieros de Montes, Eduardo Rojas, se ha mostrado optimista de cara al verano entrante desde el punto de vista de los incendios. «Pinta bien», ha asegurado tras señalar las abundantes lluvias que han caído en la mayor parte del territorio esta primavera.

La excepción, según ha explicado, es la región sudeste de España, donde «no hay manera de que llueva desde hace cuatro años», mientras que en el resto la previsión de cara al verano es positiva. Según el nuevo rector, que ocupó el cargo este jueves, la experiencia indica que «siempre los años que han sido lluviosos se gana mucho» y ha señalado que «si en junio hay cuatro tormentas, la hierba en julio va a estar verde», dificultando el estallido de grandes incendios.

Aún así, reconoce que hay «factores incontrolables» que podrían provocar incendios de gravedad en caso de producirse como los vientos o una alta incidencia de rayos. «Si sopla el Nordes en Galicia durante 15 días, que es como poner un secador de pelo, ya puede ser buena la situación que a la tercera o cuarta se van a seguir produciendo incendios», ha explicado.

Hasta ahora, los datos de incendios en 2016 indica que durante los cuatro primeros meses del año se han quemado un total de 1.916 hectáreas de superficie, lo que supone 4,24 veces menos (8.128 hectáreas menos) que en el mismo periodo del año pasado y 18,4 veces menos (24.241 hectáreas) de la media del decenio.

Según Rojas, la causa se debe en parte a que las temperaturas suaves del otoño e invierno han mitigado el efecto de las heladas, uno de los factores que contribuyen a que el espacio forestal se reseque y arda, y las lluvias de la primavera, que es «la época crítica del inicio de los incendios», han humedecido el terreno dificultando la aparición de conatos de incendio.

Fuente y fotografía: Econoticias