Según datos de la Organización Internacional del Trabajo aportados por el experto ambiental y presidente de la consultora energética N2E, Javier García Breva, la transición energética generará cuatro puestos de trabajo por cada uno que destruya en el proceso de descarbonización de la economía. Breva ha presentado un informe sobre ‘Los empleos de la Transición Energética’ en el que describe las directivas europeas de energías renovables y eficiencia energética, tanto las vigentes como “las que están por venir en el paquete de invierno”, como un impulso para la política energética española.
Aplicar lo estipulado por estas directivas “de manera plena y dentro de plazo” será, a su juicio, la mejor actuación posible de un Gobierno, el español, que “hasta ahora ha percibido las tecnologías verdes como un sobrecoste y no una oportunidad“. Además, estas herramientas ayudarán a solventar “el principal problema de la economía española: la baja tasa de empleo”. García Breva ha augurado que los nuevos puestos de trabajo se concentrarán, principalmente, en dos sectores: la edificación y la electricidad en el transporte. En el sector de la construcción, el primer reto a afrontar será una tarea tan “titánica” como la de descarbonizar el parque ya edificado, según ha añadido durante la presentación la secretaria técnica de Green Building Council España, Dolores Huerta. Los tres expertos que han participado en la presentación del informe han insistido en la necesidad de prever “qué formación es necesaria para acometer estos desafíos” y han defendido que este tipo de capacitaciones deberían estar ya incluidas “en el currículum de aprendizaje de grado o formación profesional de los técnicos” del futuro inmediato.